Voy a dar un ejemplo que en muchas casas se da... -"en la mesa no se habla ni de política ni de plata"-, ¿y por qué no?, me imagino porque estos temas pueden ser controversiales y generar conflictos personales en la familia. ¿Pero por qué tienen que haber conflictos personales, si es una contraposición de ideas?
Es esta forma de relacionarnos con nosotros mismos que encuentro que atenta (desde mi perspectiva) contra los cambios, las revoluciones, las reformas, o como quieran llamarlas. Es así cuando muchos jóvenes no hablan de política, a pesar que tienen ideas más o menos definidas. Razones: no pelearse con los amigos, no "caer mal", no "ser latero"... Esa tontera que escuche en algún lado que "los políticos en el congreso hacen política, para eso estan. Nosotros no tenemos que andar hablando esas cosas". ¿Cómo llega alguien a pensar en eso? Porque nos han enseñado a pensar así, a ser "apolíticos", a no manifestar nuestras ideas de sociedad porque es "latero". Son los mismos políticos y empresarios los que nos enseñan que ellos hacen política, que para nosotros no es tema, y así cuidar sus puestos de poder.Nótese que no parto del punto de vista que la gente que calla es de izquierda y que debería hablar por la revolución, sino que también a incluyo a jóvenes de derecha, de centro, de una posición política no identificable dentro del absurdo esquema binominal (derecha - izquierda), a todos.
Es necesario que hablemos sin miedo nuestros pensamientos, que discutamos, pero siempre que lo hagamos debe ser una discusión de ideas, con argumentos válidos y fuertes, que uno este convencido de ellos. Hablar de la sociedad no debiera ser lata, debemos reapoderarnos de la palabra "política" tan hecha mierda estos días. La política no la deben hacer sólo los políticos y los empresarios, la política en primer lugar y el más importante lo debemos hacer nosotros, la gente.